Noches mágicas hay muchas. De tan especiales y esperadas como la verbena de San Juan, ¡pocas! Dejando a un lado las divisiones entre los partidarios y los detractores de la pirotécnica, celebrar la llegada del verano es un motivo que alegra a la mayoría de las personas, y que cada 23 de junio por la noche, llena las calles de pequeños - y no tan pequeños - tirando petardos y cohetes, y las cocas de crema, fruta confitada o chicharrones, son las últimas en llegar a la mesa y las primeras en terminarse.
Te traemos algunas curiosidades sobre la noche más corta del año, para que puedas sorprender a tus invitados entre copa y copa de cava.
San Juan en todo el mundo
El solsticio de verano es una de las festividades más importantes de los Países Catalanes, aunque también se celebra en otros lugares de Europa, el norte de África y Latinoamérica como Portugal, Dinamarca, el Magreb, Inglaterra, Irlanda, Noruega, Finlandia, Suecia, Estonia, Argentina, Brasil, Bolivia, Chile, Cuba o Paraguay, entre otros.
La estrella de la noche: el fuego
Vayas donde vayas del planeta a celebrar la noche de San Juan, seguro que encontrarás una hoguera. El fuego es, sin duda alguna, el elemento más relevante de la noche. Hay decenas de explicaciones por las que el fuego es el protagonista, como por ejemplo un culto pagano relacionado con el sol; que es un elemento purificador con poder antiinfeccioso, y también años atrás se utilizaba para alejar a los malos espíritus. Sea por el motivo que sea, lo importante es tener sensatez para no convertir la noche más mágica del año en una jornada eterna para el cuerpo de bomberos.
San Juan, único santo del que se conmemora el nacimiento
La noche del 23 celebramos el inicio del verano y también es la víspera del día de San Juan. Curiosamente, San Juan Bautista es el único santo del que se conmemora el día de nacimiento, y no el del martirio o la muerte. Por tanto, es innegablemente un día de alegría y celebración, ¡lo mires por donde lo mires!
¡No hay verbena sin Coca de Sant Joan!
Pondríamos la mano en el fuego (o en este caso, hoguera) que habéis tenido la clásica discusión a favor o en contra de la torta de fruta confitada. Sea como fuere, en la mesa no puede faltar una coca de San Juan acompañada de un buen cava. Pero atención, porque según la tradición, la coca de San Juan debe ser alargada y con los bordes redondeados. Más concretamente debe ser el doble de larga que de ancha, en relación directa con la proporción entre el día y la noche por San Juan.
Un San Juan digno de Instagram
Y por si deseas disfrutar de la noche también en las redes sociales, te dejamos algunos consejos para hacer fotos a los fuegos artificiales con el móvil: utiliza siempre un trípode o un soporte para evitar que las imágenes queden movidas; dispara siempre con el temporizador, así no se moverá el dispositivo al pulsar el botón; juega con el tiempo de exposición para conseguir el mejor resultado posible y ajusta la sensibilidad al mínimo. Por último, solamente te quedará presumir de fotografías.
